Dos culonas ricas y cachondas son enrabadas por un animal muy caliente, las nalgonas se exhiben desnudas, todas depiladas y a cuatro patas, se pueden ver sus lindas nalgas y sus panochitas rasuradas y tersas, sus rajas están preparadas para ser penetradas hasta dejarles las bolas del bicho pegadas a los cachetes de los culos, se les ha humedecido las chochas de tonto tocárselas entre ellas, y el perro puede oler su aroma a sexo.
Entonces es cuando ellas comienzan a gatear alrededor del animal peludo, quieren que cuanto antes el chucho se decida y las cubra para follarlas al fin, pero no tendrán que esperar mucho, porque en cuanto se les acerca, el perro las monta y una por una las va gogiendo de forma imponente, ellas no esperaban menos de esa bestia, y lo que es seguro es que les impactó el tacto de esa pija tan rugosa, aspera y deliciosa al mismo tiempo. Las guarras culonas se lo gozaron a tope cuando la bestia peluda decidió violarlas.
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